El máximo difusor de la nueva doctrina…
“Conveniencia y economía son los medios que debe naturalmente emplear el arquitecto, y los criterios que deben regir sus principios, los únicos que nos pueden guiar en el estudio y en el ejercicio de este arte. Para que un edificio sea conveniente, primero es necesario que sea sólido, saludable y cómodo.”Durand (París, 18 de septiembre de 1760 – Thiais, 31 de diciembre de 1834) fue un arquitecto francés, teórico y profesor en la Escuela Politécnica de Paris. Trabajó para Boullée durante algún tiempo, lo cual explica la influencia de éste último en algunos de sus proyectos.
Jean-Nicolas-Louis Durand, “Horizontal Combinations,”
Para Durand, la utilidad social es la primera finalidad de la arquitectura. La conveniencia de todo edificio así como la economía de la figura del proyecto y su construcción deben estar sujetos a este principio. La conveniencia incluye la estabilidad, higiene y comodidad, mientras la economía reúne la simetría, regularidad y sencillez. Es ridículo y estéril adornar los edificios con elementos fantasiosos y costosos, la naturaleza y el sentido común encuentran medios simples y seguros tanto en diseño como construcción. Ya no se quiere “entretener la vista con vacías imágenes” sino que se buscan las “formas y proporciones…resultantes de las características de los materiales y del uso de los objetos”. Abogaría por los parques autónomos, introduciría el nuevo concepto de movilidad en el mobiliario y llevaría el sistema de pabellones y disposición en bloques a su más pura expresión.
El legado de Durand y su gran labor de difusión de las nuevas ideas y métodos inspiraría a otras grandes figuras como Klenze, Friedrich Gilly, Grantz y Schinkel